El sexo continúa siendo un tema cargado de tabúes, de desinformación. Por eso, en la entrada del día de hoy te vamos a preparar para poder desmentir los mitos sobre el sexo. Así que prepara las palomitas y ponte cómod@. Quizás aprendas un par de cosas nuevas, rías un poco o incluso te cuestiones por qué han sobrevivido estas creencias tan alocadas entre nosotros en pleno siglo XXI.

1. «En la primera vez de las mujeres, siempre sangran»
Afirmar que todas las mujeres sangran en su primera relación sexual es uno de los mitos más comunes sobre el sexo, lejos de ser una verdad absoluta. El himen es una membrana más flexible de lo que parece y su constitución varía de persona a persona: algunas mujeres lo tienen más elástico, otras ya lo han «destruido» en su práctica del deporte o en la práctica del ciclismo. Y si llegas a tener sangrado, tranquil@, es absolutamente normal, pero no garantiza nada.
2. «El tamaño importa»

Este mito sobre el sexo es uno de los clásicos. La satisfacción sexual no dependerá del tamaño sino de la conexión, la manera en la que se comunican, la técnica. Y el clítoris no tiene por qué quedar impresionado ni en medidas extremas. Por ello, dejemos de preocuparnos por reglas del metro que no son necesarias.
3. «Entre más sexo tengas, más se expande tu cavidad vaginal»
La verdadera historia: Amig@, ¡no es un pantalón viejo! La vagina es un músculo muy elástico que vuelve a su estado habitual tras el sexo. En consecuencia, no, no “se agranda” ni queda como túnel del metro. Es otro de los mitos sobre el sexo que tiene más que ver con tabúes que con ciencia.
4. «No puedes quedar embarazada si es tu primera vez»

La verdad es que esta sí que es para morirse (o al menos para reírse, si es que te la crees). Si hay ovulación y no se usa protección, puedes quedar embarazada, sin lugar a dudas, y no importa si es la primera, la quinta o la décima vez. Consejo de amiga: ¡Protégete!
5. «El sexo tiene que durar muchísimo para ser bueno»
No necesitas sesiones maratónicas para que el sexo sea increíble. A veces, la calidad es mejor que la cantidad, y una conexión genuina puede ser más placentera que cualquier récord Guinness. Otro de los mitos sobre el sexo que no es real.
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6. «Si no alcanzas el orgasmo, de verdad que algo no va bien».

El orgasmo no constituye la meta definitiva, sino un plus. El sexo es también intimidad, conexión, placer compartido. Si no lo consigues, no te estreses: conocer lo que nos gusta lleva tiempo y comunicación.
7. «El tamaño del pie o la mano indica el tamaño del pene«
No hay evidencia científica que respalde esta creencia. El tamaño del pie o la mano no tiene ninguna relación con las partes íntimas. Mejor no saquemos reglas de medición de la nada.
8. «El sexo es sucio o peligroso«

La realidad es que el sexo no es “sucio”, pero puede ser riesgoso si no se toman las precauciones adecuadas. Mantener una buena higiene, asegurar el consentimiento, utilizar métodos anticonceptivos y protegerse contra las ITS son claves para que esta actividad sea segura y saludable.
9. «Si no hay erección, significa que no te desea«
La erección masculina puede verse afectada por diversos factores, como el estrés, la fatiga o incluso la dieta. No lograr una erección no implica que no haya deseo; simplemente puede ser una reacción natural del cuerpo.
10. «El porno es una guía para el sexo real«

El porno es una representación ficticia y no captura las complejidades de las relaciones sexuales en la vida real. Usarlo como guía puede llevar a tener expectativas poco realistas.
Desmontando mitos, creando conexiones
Hablar de sexo sin tabúes es no solo importante, ¡sino necesario! Estos mitos sobre el sexo no son solo ideas equivocadas; son obstáculos que nos impiden disfrutar plenamente de una experiencia que puede ser divertida, placentera y significativa. El conocimiento es poder, y cuanto más informados estemos, mejor podremos tomar decisiones que beneficien nuestra salud física, emocional y sexual.
Así que, la próxima vez que escuches un mito como los que mencionamos aquí, no dudes en corregirlo (con cariño, por supuesto) y compartir la verdad. Desmitificar el sexo es el primer paso para construir una sociedad más abierta, empática y conectada. Recuerda: el placer no se encuentra en la perfección, sino en la autenticidad.
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