
Si iniciaste tu “era roomie” o estás pensando en vivir con roomies por primera vez, ¡necesitas leer esto!
El proceso de independizarse puede ser complicado, y vivir solo, aún más complejo. Pero tranquilo, aquí estamos para enseñarte todo lo que necesitas saber (y nadie te enseñó) sobre la convivencia con roomies.
1. Incómoda al inicio, pero evita una guerra
Amix, este es uno de los consejos más sabios que te dará alguien: pon sobre la mesa las reglas de la casa desde el principio. Hablar sobre tus expectativas, deseos y escuchar las de tus compañeros te ayudará muchísimo a mejorar la dinámica del hogar.
Por ejemplo, si te molesta que los platos sucios se queden en el lavabo más de un día, o que dejen prendida la televisión todo el día, no tengas miedo de decirlo. Pero también escucha las peticiones de tus compañeros. Lo importante es llegar a acuerdos que funcionen para todos y fomenten una dinámica amigable en el hogar.
Para eso, échale un ojo al siguiente punto.
2. Sé flexible
Lo sé, todos queremos lo que queremos, cuando y cómo lo queremos. Estamos acostumbrados a mantener el orden y forma de como se hacía en nuestra casa, pero recuerda: este nuevo espacio es de todos.
Muchas veces, las cosas podrán adaptarse a ti, pero también habrá ocasiones en las que tendrás que adaptarte tú. Vivir con roomies por primera vez es adaptarse por primera vez: abrete al proceso. Enumera tus prioridades respecto a la convivencia, y verás que hay muchas cosas en las que puedes ceder para llevar una convivencia más armoniosa.
3. La odisea de la limpieza
Esto es un tema delicado, aunque muchos no lo crean. Llamar “sucio” a tu compañero de casa (o que te llamen así) puede cambiarlo todo. Para evitar malos ratos, propón organizar un calendario de limpieza con días asignados para cada persona.
Por ejemplo, si son tres personas:
- Una puede encargarse de sacar la basura de la cocina los viernes.
- Otra, de barrer y trapear los lunes.
- Y la tercera, de limpiar mesas y aspirar los miércoles.
De esta forma, mantendrán la casa limpia y ordenada sin conflictos.
4. Visitas y parejas
Si tienes pareja o tus amigos te visitan con frecuencia, toma esto en cuenta. Vivir solo es muy diferente a vivir con roomies, y los espacios compartidos deben respetarse para que todos estén cómodos.
Puedes disfrutar de un café con tus amigos en la sala o tener una noche de películas con tu pareja, pero asegúrate de:
- Avisar con anticipación, ya que puede que tu compañero necesite estudiar o descansar.
- Dejar todo limpio después de usar los espacios comunes.
Un poco de consideración hará que la convivencia sea mucho más llevadera.
5. Haz equipo
Amix, no hay lugar como el hogar, y si has decidido iniciar esta nueva etapa de tu vida, haz todo lo posible para que tu depa o casa sea un espacio seguro y agradable.
A veces, tener una buena conversación con tus roomies o crear espacios de convivencia puede desarrollar amistades más allá de las paredes de la casa. Es indispensable tener paciencia, aprender a perdonar y lidiar empáticamente con aquellas cosas a las que no estás acostumbrado.
Ver a tus compañeros de casa como un equipo y no como enemigos hará que tu estancia sea mucho más amena y llevadera.

Un tip más, porque nos importa tu bienestar
Caritas vemos, mañas no sabemos. Si te mudas con gente nueva o que no conoces bien, asegúrate de tener una llave de tu cuarto para dejarlo con seguro.
Si guardas dinero u objetos de valor, es mejor prevenir. No se trata de vivir en estado de alerta, pero un poco de precaución no hace daño y te dará más confianza mientras conoces a las personas con las que compartes casa.
Con estos consejos, vivir con roomies por primera vez será una experiencia mucho más llevadera, e incluso podrás construir amistades duraderas. ¡Buena suerte en esta nueva etapa!
Ojito:
La primera vez es difícil: Vivir con Roomies por Primera Vez
Abraza el proceso y no te frustres si no funciona. Está bien. No siempre compatibilizamos con todos, y es muy probable que en tu primera vez viviendo con roomies no hagas «click» de inmediato, y eso es válido.
Lo mejor que puedes hacer es evaluar la relación que estás estableciendo con ellos y reflexionar sobre tus reacciones ante las situaciones cotidianas que suceden en casa. Vivir con roomies por primera vez, al igual que las primeras veces en muchas cosas, marca un antes y un después.
Busca quedarte con lo mejor de las personas que conociste; al fin y al cabo, es una experiencia más de la que podrás aprender mucho. Los conocimientos que adquieras ahora los aplicarás en tus futuras convivencias. ¡Sácale el mayor provecho!